Madres Ambiciosas By Roxana Marroquin

Hoy voy a hablarte de un tema que me toca mucho las narices cuando lo veo… es real… me pongo un poco de malas cuando lo veo por las redes. “Encuentra tu propósito”. Como si solo tuvieras uno en la vida, conocieras los desgnios de dios o el universo y que si no lo encuentras… no vas a poder vivir alineada. Muchos coaches te hablan del “propósito vital” como que de repente bajan ángeles cantando con su voz celestial mientras te iluminan con lo que has venido a hacer a la tierra. Tal vez esto le ha pasado a alguien o realmente lo cree. Pero justo ahí está el meollo del asunto: es su creencia. El problema es cuando tú crees que encontrarlo es imprescindible y como no encuentras algo así de grandilocuente, no sientes nada en lo que tu corazón y tu espíritu se sienten elevados al nirvana, te crees que no has encontrado tu propósito y por tanto no puedes cambiar. ¡Deja de buscarlo! Hoy te hablo de 4 razones por qué deberías dejar de buscarlo y te cuento que si deberías estar haciendo.